jueves, 30 de agosto de 2012

Los 39 escalones, 3.2 martines

Película de 1935 dirigida por Alfred Hitchcock y escrita por Charles Bennet e Ian Hay, quienes se basaron en la novela homónica de John Bucham. Aunque la historia tenga algunas diferencias importantes con el texto original, es un muy buen relato con un final tremendo.
La historia trata sobre Richard Hannay quien intenta delatar a una organización de espias extranjeros que quieren sacar información relevante sobre Gran Bretaña mientras se esconde de la Policia, quienes lo acusa de un asesinato que no cometió. A lo largo de los 80 minutos, Hannay sufre retrasos e inconvenientes (al estilo "After Hour" de Scorsese). La trama se resuelve cuando faltan pocos minutos para el final con un indició que había aparecido al principio de la película.
Haciendo honor a su fama de "maestro del suspendo", el misterio existe desde la primera toma cuando el director decide enfocar los pies del protagonistas en vez de su rostro. A pesar de que este uso se repite a lo largo de todo el film y siempre genera una linda sensación, aveces este recurso podría haberse obviado.
También hay algunos saltos temporales que no se entienden bien. No se ve que bajó el sol o algún cambio en el escenografía. Por lo contrario, hay algunas otras elipsis donde funde a negro que son muy buenas.
Curiosamente una sola escena esta musicalizada, y esta no es una cerca del climax ni mucho menos, simplemente marca el fin de una subtrama que al espectador no le interesaba mucho ver, y que de terminar de otra manera nadie se hubiera enojado.
Pueden verla completa en youtube.


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